Por Bernardo Sabisky
Argentina ha atravesado una serie de desafíos económicos en las últimas dos décadas, desde crisis financieras hasta cambios regulatorios que han afectado a empresas tanto locales como extranjeras. Sin embargo, en 2025, el país está mostrando signos claros de reactivación comercial. Un número creciente de marcas internacionales está regresando o ampliando su presencia en el mercado, confiadas en una recuperación económica que genera expectativas positivas. Al mismo tiempo, muchas de las grandes empresas que abandonaron Argentina durante los últimos gobiernos kirchneristas han dejado vacíos que ahora están siendo aprovechados por nuevos actores comerciales.
Nuevas Apuestas: Marcas Internacionales que Regresan y Expanden su Presencia
En los últimos años, con el panorama económico más estable y un consumo en recuperación, varias marcas internacionales han decidido apostar nuevamente por Argentina. Entre las apuestas más destacadas, encontramos a Decathlon, que regresa al país tras su salida en 2002 a raíz de la crisis económica. La cadena francesa de artículos deportivos tiene planes de abrir entre 20 y 30 tiendas en todo el país, comenzando con su primer local en Buenos Aires. Este regreso refleja el creciente interés por la actividad física y el deporte en el país, un mercado potencialmente lucrativo.
Por otro lado, Pizza Hut, la cadena estadounidense de pizzerías, también está evaluando su regreso al país tras tres intentos fallidos en los años 80, 90 y 2010. A pesar de sus fracasos previos, la marca ahora considera que las condiciones actuales del mercado podrían ser más favorables para su expansión, aprovechando la reactivación del consumo gastronómico y el apetito por franquicias internacionales.
Otra de las grandes noticias es el desembarco de Victoria’s Secret, que abrirá sus puertas en 2025 en Unicenter y Galerías Pacífico, luego de varios años de postergaciones por la pandemia y el contexto económico. La firma, que solo había tenido presencia en los Duty Free Shops de Ezeiza y Aeroparque, finalmente podrá ofrecer sus productos directamente al consumidor local, lo que marca un avance importante para el sector de moda y belleza en el país.
Marcas de Lujo: Gucci y Dolce & Gabbana Confirman su Ingreso
El segmento de lujo sigue mostrando un gran atractivo para las marcas internacionales. Gucci, por ejemplo, acaba de registrar su marca en el Instituto Nacional de la Propiedad Intelectual (INPI) y podría abrir su primera tienda en Buenos Aires en los próximos meses, reflejando el optimismo de la marca respecto al poder adquisitivo de los consumidores argentinos.
De manera similar, Dolce & Gabbana tiene planeado inaugurar su tienda en la exclusiva Avenida Alvear o en Patio Bullrich en 2025, con una propuesta de lujo que apunta a una clientela de alto poder adquisitivo. Ambas marcas se suman a otras que continúan apostando al mercado argentino, como Chanel, Tommy Hilfiger y Calvin Klein, que siguen ampliando su presencia en el país.
El Retiro de Grandes Marcas: Las Salidas Durante Gobiernos Kirchneristas
Aunque en los últimos años hemos sido testigos de la llegada de nuevas inversiones, también es importante recordar que, durante los gobiernos kirchneristas, muchas marcas internacionales decidieron abandonar Argentina debido a las dificultades económicas, la inflación y la inestabilidad cambiaria. Este éxodo dejó una marca en la economía, especialmente en el sector del empleo.
Uno de los retiros más resonantes fue el de Falabella, la gigante chilena de retail, que cerró todas sus sucursales en 2018, después de más de dos décadas de presencia en el país. La crisis económica y la falta de competitividad con las empresas locales fueron los principales factores que llevaron a la marca a abandonar el mercado argentino.
Walmart también vendió sus operaciones en el país a Grupo De Narváez en 2019, luego de enfrentar el desafío de mantener su rentabilidad en un contexto de alta inflación y devaluación constante. Después de más de 20 años de operación, la marca estadounidense decidió que el entorno económico argentino ya no era viable.
En el sector deportivo, Nike se retiró en 2020, dejando de operar directamente en Argentina y transfiriendo la distribución a un licenciatario local. Los altos costos operativos y la inestabilidad económica fueron determinantes en esta decisión. Similarmente, el gigante energético Enel también optó por vender sus activos en 2022, debido a la imposibilidad de sostener sus operaciones en un contexto de restricciones de precios y deudas crecientes.
Empresas de otros sectores, como Pierre Fabre, Gerresheimer y Eli Lilly, abandonaron el país en la misma época, afectadas por la inflación y las fluctuaciones cambiarias que complicaron su rentabilidad. De manera similar, Lala, la empresa láctea mexicana, decidió retirarse por razones económicas.
Las aerolíneas no estuvieron exentas de este fenómeno. Latam, por ejemplo, redujo su presencia en Argentina, dejando de operar vuelos domésticos, mientras que Norwegian, Emirates Airlines y Qatar Airways ajustaron o cesaron sus operaciones, dada la baja rentabilidad y las complicaciones económicas.
Un Mercado en Transformación
El contraste entre las marcas que se han retirado y las que están regresando al país muestra la evolución de un mercado argentino que aún atraviesa momentos difíciles, pero que comienza a mostrar signos de resiliencia. Las empresas que se fueron, como Walmart, Falabella y Nike, enfrentaron desafíos imprevistos relacionados con una economía inflacionaria y un sistema de precios controlados que limitaba su capacidad de operar con rentabilidad. Muchas de estas salidas también generaron un impacto negativo en el empleo, dejando vacíos que ahora están siendo ocupados por nuevas inversiones.
Por otro lado, el regreso de marcas como Decathlon, Pizza Hut y Victoria’s Secret, así como la llegada de marcas de lujo como Gucci y Dolce & Gabbana, refleja un cambio en la percepción del mercado. Estos regresos están basados en la estabilización económica y el aumento del consumo, lo que representa una recuperación de confianza por parte de las empresas internacionales. Además, el retorno de estas compañías está llevando a la creación de nuevas fuentes de empleo, una señal positiva para un país que aún enfrenta una tasa de desocupación elevada.
Aunque durante los años previos muchas marcas decidieron retirarse de Argentina debido a la falta de condiciones económicas favorables, las recientes inversiones internacionales son un indicativo claro de que el país sigue siendo un mercado atractivo. La mejora de la situación económica, la estabilización del consumo y la apertura de nuevas oportunidades laborales han sido claves para este cambio, lo que sugiere que Argentina podría estar en el camino hacia un nuevo ciclo de crecimiento y expansión comercial.